jueves, 1 de septiembre de 2011

Los retos del Joar


Este finde Fran volvió a preguntarme si no me apetecía ir al Joar, pregunta que se repitía desde hace tiempo cuando hablabamos de preparar rutas. Mi respuesta siempre era buscar una excusa para no ir, y es que el recuerdo de la paliza que es subir a este monte saliendo desde Logroño me dura los ya más de 3 años que han pasado desde que lo encumbré. Y desde entonces no había vuelto, por algo era...

Este finde me pilló con la guardia baja y con muchas ganas de bici, así que acepté su envite y preparé la ruta. Él sólo quería subir arriba, que no había estado nunca, pero yo quería bajar de allí, y hacerlo por la senda "imposible". Al final cada uno tiene sus retos personales, pero todo es bici y los dos disfrutamos y sufrimos de ese montón de piedra desordenada llamado Joar (También Ioar o Yoar, como más guste).

Salimos de Logroño prontito y subimos hacia Lapoblación como siempre...


Y como siempre como siempre... antes de Lapoblación nos desviámos pensando en atajar (sin mirar el gps, que cuesta mucho sacarlo del bolsillo...) y al final nos metemos en una pequeña trampa en forma de senda sucia, que para más verguenza no era la primera vez que la rodábamos... al final salimos a un campo segado y a la carretera buscada...


Y en la carretera ya se ve completo y destacado el Joar:


Seguimos a lo nuestro, aún quedan kilómetros para empezar la subida al Joar, lo que ahora toca es bajar a Marañón por la senda primero y por pistas después:


 Tras parar a repostar seguimos el camino dirección Kampezo, desde donde comenzará la temida subida: 800 m de desnivel en 8 km de "pista". Intentamos tomarnoslo con calma, pero pronto la cosa se complica por el terreno tan roto, lo que te obliga a ir siempre forzado.


Subimos sufriendo sobre la bici, sin poder hablar y con pocos descansos para las piernas. La piedra suelta combinada con la pendiente hacen que la subida sea una tortura. Ciclable, pero una tortura. Los dos estamos de acuerdo: "No es la pendiente, son las piedras".


En la parte final la pista mejora mucho y deja pedalear, pero tras la dureza de lo anterior y con la pendiente de esta parte, la subida continua haciéndose muy dura. Vamos pidiendo la hora y contando los metros de desnivel que nos restan... 150, 100, 50... ¡por fin!


Llegamos a la cumbre con ganas de tirar la bici y descansar. Al final todo llega y la subida se acaba, pero hay que tener paciencia porque esta subida se hace muy laaaaaarga.


Desde la cumbre las vistas son buenísimas, en todas direcciones hay montes destacados y vamos repasando nuestras conquistas y nuestros retos pendientes... la lista es interminable ya que se domina medio Pais Vasco, media Navarra y la mayor parte de las sierras de La Rioja. Y además la sensación de altura y prominencia es muy alta:


Continuamos la marcha ya pensando en la bajada. Fran me deja elegir así que vamos a por lo más dificil: la bajada al santuario de Kodes. Esta senda fue calificada como inciclable por la gente de kdds hace ya más de 3 años, y desde entoces tenía guardado el track para algún día intentarlo

Primero la senda sigue la cresta por un precioso hayedo, y este tramo coincide con la ruta anual de Santa Cruz de Campezo y también con una de las rutas negras del centro Btt de Izki. Esta parte del hayedo es fácil y nos muestra algunos ejemplares de haya muy grandes y vistosos:


Salimos del hayedo y la senda se hace más dificil, bajando hacia un collado entre pequeños arbustos. Aquí ya tenemos un par de pasos difíciles, pero nada inciclable.


En el collado nos vamos hacia el sur por la senda, que está marcada como GR, y pronto la cosa se complica. Aquí comienza el reto y la cosa se complica con escalones, piedra suelta y giros cerrados. Todo en un ambiente espectacular.


Fran pronto deja de arriesgar miestras yo sigo intentándolo todo. Algunos pasos son de órdago y cada vez va a más, hasta llegar a una zona donde ya no veo ninguna posibilidad de paso. Esta zona realmente imposible son sólo unos 100 m, que se bajan andando con cuidado y muy lento pero sin peligro. Tras poner los pies en la tierra en todos los sentidos, la senda mejora y vuelve a ser "ciclable".


La senda sigue siendo dificil, y en esta zona lo es por la fuerte pendiente y la piedra suelta, aunque se puede bajar si dominas el derrape y el freno... Poco a poco la senda mejora y cada tramo es más sencilla, entrando en una zona de bosque donde ya es una senda llevadera.


Al poco rato la senda sale a un camino más ancho pero también muy roto y lleno de piedra suelta, por el que se desciende con cuidado pero sin problema hasta el Santuario de Codes.


Los retos ya están superados, así que de aquí queda regresar a casa... primero por carretera hasta Azuelo, para desde allí subir a los molinos, bajar a Aras, Viana y por el camino de Santiago a Logroño.


Tremenda ruta y gran reto para nuestro nivel, tanto físico como técnico. La bajada recomendable sólo si te gusta buscar el límite, aunque la parte realmente dificil pero bajable es corta, y después hay mucho tramo de zona suelta y de camino.

El track lo tenéis en wikiloc de parte de los kdds: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=307712

Más fotos: https://picasaweb.google.com/103281443251627272465/LogronoKampezoJoarSantuario#slideshow/5646765466186494354

Nos vemos.

.

1 comentario: